Día tras día las marcas personales toman relevancia, no solamente en el mundo del emprendimiento sino como un escalón más de realización profesional. Compartir tu conocimiento con el mundo, aportar tu visión sobre los temas que dominas y cautivar a una audiencia específica.

Pero, te preguntarás, ¿por dónde empiezo a potenciar mi marca personal?


Lo primero es tomar la decisión de hacerlo, no porque esté de moda sino porque tienes el deseo de compartir lo que sabes… Trázate un GRAN objetivo a alcanzar en el mediano plazo. ¿A dónde quieres llegar con tu marca? Esto varía para cada persona, puede ir desde cambiarse a un mejor trabajo, independizarse profesionalmente o convertirte en un referente dentro de tu rubro.

Lo segundo es que los temas que vayas a abarcar dentro de tu marca, si bien pueden ser diversos, deben ser temas que te apasionen… Sino corres el riesgo de aburrirte rápido y abandonar la construcción de tu proyecto.

Busca referentes dentro del rubro en el que te quieras desenvolver, no para copiarte sino para inspirarte y buscar tus diferenciales… Aquí puedes evaluar diferentes aspectos, desde los temas que tocan, su forma de comunicarte, a qué público se dirigen, cómo presentan la información, etc. Mientras más referentes tengas, ¡mejor! Esto ampliará tu perspectiva de qué hay en el mercado y así encontrar un espacio para crecer.

Una vez que hayas atravesado esta etapa de introspección y tengas claro lo que vas a ofrecer, puedes continuar a la siguiente etapa: Construir tu identidad de marca.

  • Identificar a quién le hablas: Escoge un nicho de mercado al que te quieras dirigir inicialmente, de esta forma podrás adaptar tu propuesta de valor a sus necesidades. No obstante, sé flexible y mantente en constante observación de tu comunidad, quizás termines conectando mejor con un público que no tenías mapeado.
  • Desarrollar tu estilo visual: Aquí entran colores, tipografías, iconos, y cualquier elemento por el que quieras que tu público te reconozca. Estos tienen que responder a tu estilo único e individual.
  • Tener un tono y mensaje original: Aunado a los puntos anteriores, tu comunicación debe ser original, siempre buscando ganar la confianza de tu audiencia desde tu expertise. Comparte tu historia real y crea contenido alineado con tus valores y sus necesidades.

Finalmente, recuerda dos cosas: 1. Debes mantenerte en constante evolución y mostrarlo para así mantener cautivo a tu público, y 2. Nunca olvides que tu mayor diferencial es ser TÚ mismo, pueden haber miles de personas hablando del mismo tema pero ninguno lo hace como tú.

¡Apuesta por tu marca personal y conquista tus metas profesionales!